La reforma sanitaria vista como «visitante» – por Pilar Sánchez-Bella

Washington, DC.- Esto iba a ser una respuesta al último post del blog de Gus, pero me he emocionado y he superado con creces el número de caracteres permitidos a los comentarios.

A pesar de lo mediocre que nos pueda parecer desde una perspectiva europea el proyecto de ley aprobado anoche, ayer fue un momento emocionante.

Todavía quedan batallas que luchar, pero hay una ley de sanidad.

El discurso de Stupak fue magnífico. Claro que había sido pactado (como todo lo que pasó durante el barroco procedimiento que guió la sesión), pero Stupak dijo algo tan obvio como importante: la vida de las personas que no tienen acceso a un sistema sanitario es tan importante como la de los no nacidos. Yo soy pro-elección y aunque entiendo a los que no lo son, me parece irónico que el debate sobre el aborto se haya convertido en un obstáculo para la reforma sanitaria. Es como evitar que se desarrolle una vacuna contra el cáncer por querer que se erradique la malaria.

Stupak también acertó al denunciar las maniobras dilatorias de los republicanos. Es una tendencia natural el que la oposición trate de boicotear las propuestas del partido en el poder, pero la estrategia de los republicanos en este país y en este momento es indignante. No hubo ni un sólo voto republicano a favor de la propuesta! Y esto no fue ni una sorpresa  ni una novedad. Lleva siendo la estrategia de los republicanos desde poco antes de que inaugurasen a Obama. Reflejo de esa estrategia fue  la moción que lanzaron ayer antes de que se aprobaran las enmiendas, basada exclusivamente en un cálculo electoral de cara al noviembre que viene. En serio, es muy triste que la agenda de un partido sea votar en contra del otro, voten lo que voten.

En cualquier caso, me encantó escuchar los «I»s y los «Nay»s. Un poco arcaico!

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